Las más de 160 hectáreas del Parque Juan Carlos I lo convierten en uno de los principales pulmones verdes de Madrid, por encima del Parque del Retiro. Francamente, los madrileños podemos estar orgullosos por la cantidad y variedad de zonas verdes. Pocas ciudades europeas de la extensión de Madrid pueden decir lo mismo.

El Parque fue inaugurado en 1992 con motivo de la celebración de ‘Madrid capital europea de la cultura’. Después de los faustos de las Olimpiadas y la EXPO sevillana que dejaron ruina, deuda y corrupción, este parque fue la pedrea que le tocó a Madrid en ese emblemático y derrochador año.

El Juan Carlos I está dotado con un auditorio de 9500 localidades que ocupa una buena parte de la superficie del parque, hoy en día vandalizado después de lustros de abandono.

Google Maps avisa que el Auditorio está “cerrado temporalmente”. Bien sabemos los españoles que en la administración española no hay nada más permanente que las decisiones temporales.

Fuente cibernética del Auditorio del parque Juan Carlos I

Recuerdo haber asistido con mi familia en una calurosa noche de verano al espectáculo de música, agua y luces, muy similar al de la Expo de Sevilla, en el ahora cerrado auditorio. Esta es la reseña que al respecto he encontrado en la red:

“….En general, las fuentes cibernéticas realizan una combinación de agua, luz, color, movimiento, sonido e incluso música que supone un gran avance cualitativo y estético respecto a las fuentes electromecánicas convencionales, sometidas a las limitaciones compositivas de los sistemas hidráulicos de funcionamiento tradicional. Gracias a un complejo sistema informático controlado por ordenador, las fuentes cibernéticas incrementan de forma casi ilimitada las posibilidades del repertorio visual y rítmico, así como las figuras móviles generadas por sus surtidores, difusores, pulverizadores y demás juegos acuáticos”.

Un recinto de este tamaño en este magnífico entorno es ideal para todo tipo de espectáculos: cine al aire libre, teatro, conciertos, danza, deporte, espectáculos profesionales y amateur…Las posibilidades son ilimitadas.

A pesar de los destrozos causados por Filomena y Carmena, el lago y las zonas verdes del parque están recuperando su esplendor, pero va siendo hora de que nuestros políticos se acuerden de los espacios culturales del Juan Carlos I, sumidos en el abandono por la desidia de los sucesivos gobiernos municipales.

La recién nacida Asociación de Vecinos de Barajas va a recordar al actual Equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid de Cs y PP, los días pares, y también los impares, que promueva la recuperación del Auditorio. Como las cuentas municipales no estarán muy boyantes y además la gestión pública suele ser defectuosa, deficitaria y origen de corruptelas, esta Asociación propone que el Ayuntamiento saque a concurso la rehabilitación y explotación comercial de este recinto. De esta manera, se conseguiría su recuperación sin que los madrileños tengamos que sufragar de nuevo su coste.

En el parque, junto a la Estufa Fría, también hay un edificio que en su día se dedicó a sala de exposiciones:

La rehabilitación/recuperación de este edificio creemos que debería ser afrontada por el propio Ayuntamiento, o cedida a alguna de las instituciones culturales de la Entidad para que valoren sus posibilidades. Estoy pensando en la cercana Feria de Madrid.

Sr. Alcalde: abandone la política del perro del hortelano y póngase manos a la obra para la recuperación de los espacios culturales del Parque Juan Carlos I. Haga posible que, a no mucho tardar, el irónico título de esta artículo pueda convertirse en un titular real de la prensa madrileña. Si lo hiciere, prometo perdonar su incumplida promesa electoral del cierre de Madrid Central.

 

José Luis Encinas

Presidente de la Asociación de Vecinos “Te ayudamos Barajas”

14.05.21